La vida

«¿Qué es la vida, una ilusión…»

O al menos eso decía Calderón, y la verdad es que cuando uno la mira desde el punto de entrar en el club de los septuagenarios la vida es eso, solo ilusión.

Nacemos sin que nadie nos haya preguntado si realmente queremos y luego tenemos que enfrentarnos a ella sin ni siquiera un manual que nos ayude a sobrellevarla.

Vas pasando etapas, en cada una de ellas eres una persona diferente, con metas nuevas, con resultados de fracaso en la mayoría y poco a poco te vas amoldando a lo que realmente la vida es, un no parar de escenas tragicómicas, más trágicas, que cómicas para acabar aceptando que no puedes hacer nada contra ese rodillo que sin prisa pero sin pausa que es el tiempo te deje en el lugar que tu no quieres pero que es el real aunque no quiera aceptarlo.

Yo ya he quemado casi todas mis etapas, no estoy descontento de mi vida, ha sido una vida intensa, incluso bonita, pero aún así el tiempo te catapulta en dirección contraria a la deseada y te dice…»Aquí mando yo…» sin más y entonces cedes y sabes que no puedes hacer nada.

Las ventanas de mi cara se van cerrando, la muelas de moler se van cayendo y aquellas amigas que me llevaban a todos lados se han cansado.

En lo que a mi respecta me importa de los tres, el del medio, que los descerebrados formen fiestas ilegales, que los Pujol no hayan devuelto el tres por ciento, que la vacuna no llegue a todos, en definitiva todo es cuestión de tiempo.