Esto es vida!

 

“Hay quién se dedica a la medicina porque quiere dedicar su vida a ayudar al prójimo. Quizás pensaba que el prestigio y los ingresos que le reportaría esa profesión le harían feliz. Pero cuando se da cuenta de que, en realidad, era poco lo que podía hacer por sus pacientes, perdió la ilusión.»

«Hay quién se dedica al arte, pero se sentía egoísta, porque sus creaciones artísticas no contribuían mucho al bienestar de los demás. Entonces decidió hacerse maestro, pero enseguida descubrió que lo único que podía transmitir a sus alumnos era una serie de datos; no podía impartirles una educación que los ayudara a ser verdaderamente felices.”

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Tener un verdadero propósito en la vida significa tener una razón para vivir, unas metas claras y algo por lo que luchar. ¿Es eso posible? Claro que sí. El hecho de que estemos dotados de inteligencia, conciencia y raciocinio muestra que existe un propósito definido para nosotros. Por eso, solo quienes viven conforme a un propósito, pueden encontrarle verdadero propósito a la vida.

¿Por qué no es sensato poner los intereses materiales en primer lugar?

Necesitamos equilibrio para que los intereses materiales no eclipsen los intereses genuinos, que son los más importantes. Lamentablemente, muchas personas centran su vida casi por completo en adquirir cosas materiales. Pero no es sensato pensar que las cosas materiales pueden satisfacer todas nuestras necesidades. Una encuesta reciente efectuada entre millonarios asiáticos revela que muchos de ellos “viven preocupados y no se sienten seguros a pesar de la posición social y el sentido del logro que les ha proporcionado su riqueza”

“El que ama el dinero nunca se satisface con lo que tiene”, reconoció el sabio rey Salomón (Eclesiastés 5:10)

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La expresión “la vida de verdad” pudiera transmitirles a muchos una imagen de placeres y lujos, como cuando se dice: “¡Esto sí que es vida!”. Una revista de noticias asiática señala: “Quienes ven películas o programas de televisión aprenden a desear lo que ven, a soñar con lo que podrían tener”. Muchas personas solo viven para conseguir riquezas y una buena posición social, aunque para ello tengan que sacrificar su juventud, su salud, su familia y sus valores espirituales. Pocos se paran a pensar que esa buena vida que fomentan los medios de comunicación no es más que un reflejo del “espíritu del mundo”, la forma de pensar que impulsa a la mayoría de la gente a actuar tras las riquezas. ¡Con razón hay tantas personas que no se sienten contentas!

¿Y qué hay de las personas que luchan por el bien de los demás, tratando de erradicar el hambre, la enfermedad y la injusticia? Sus nobles y sacrificados esfuerzos suelen hacer mucho bien. Pero por más que lo intenten, nunca lograrán cambiar este sistema de cosas por uno que sea justo y bueno.

Ahora bien, si perdemos de vista el verdadero propósito de nuestra existencia y dejamos de aferrarnos a la vida de verdad, corremos un serio peligro. Pudiéramos ser arrebatados por las inquietudes y las riquezas y los placeres de esta vida. Si no dominamos nuestras inquietudes en cuanto al sustento y nuestros deseos de obtener bienes materiales, estos podrían llevarnos a estar demasiado absortos en las cosas de este mundo. Lamentablemente, debido a que se han dejado arrastrar por el afán de hacerse ricos, muchas personas viven de una manera muy desgraciada.

Al hacerlo, al entender lo verdaderamente importante, comprobaremos lo ciertas que son estas palabras de Jesús: “Hay más felicidad en dar que en recibir” (Hechos 20:35). Y por fin habremos hallado el verdadero propósito de la vida.

4 comentarios en “Esto es vida!

  1. Es irónico porque al final los líederes religiosos son los que más poseen bienes materiales. Hay que tener en cuenta que el Papa móvil, el ejército privado del vaticano, el secuestro de Emanuela Orlandi… Ni que decir de los bienes de los pastores protestantes.
    En fin, buen post.

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